¿Cuándo necesitas un perito calígrafo?

Desconocemos en qué momento resulta necesario un perfil técnico experto en análisis forense de manuscritos y firmas.

En el mundo actual, donde la tecnología avanza rápidamente, la autenticidad de las firmas se ha vuelto más crítica que nunca. En casos de disputas legales, contratos dudosos o documentos importantes, contar con la experiencia de un perito calígrafo, o técnico forense en grafística, se convierte en un factor determinante.

¿Por qué un Perito Calígrafo?

En el ámbito jurídico, lo único que se lleva a discusión son las pruebas. Sin pruebas, no existe ningún caso. En caso de manuscritos o firmas que evidencian la presencia de falsificación, resulta imperativo buscar un experto especializado. Demostrar o no la autenticidad de las firmas desempeña un papel crucial en la toma de decisiones judiciales. En aquellos casos en los que la duda se cierre sobre la validez de una firma, la intervención de un perito calígrafo se convierte en un aliado esencial, a veces el único, para los abogados en la búsqueda de pruebas sólidas y fundamentadas.

Caso Ilustrativo: La defensa legal que depende de una firma:

La Sospecha Inicial:

Una persona puede sospechar que su firma ha sido falsificada. La casuística es amplia. Puede ser un contrato de arrendamiento modificado, un contrato laboral, un cese, etc. Lo lógico es que sepa a ciencia cierta si ha estampado o no su firma allí. Pero debe demostrarlo. Aquí ya entraríamos a valorar el perjuicio causado. Puede ser un tema menor donde no sea necesario tomar acciones o un problema con mayúsculas. Es este último donde comienza el itinerario legal.

No quiero complicar esta cuestión, pero en ocasiones existen casos de auto-falsificación de tu propia firma para intentar anular un contrato o la validez de un documento dado. Podría darse el caso y el perito debiera detectarlo.

En cualquier caso, el abogado que esta persona contrate debe contar con un informe que identifique las discrepancias en la firma presentada como prueba.

Informe del perito calígrafo:

El perito realiza un análisis detenido de la firma impugnada y la compara con firmas auténticas del acusado. Para ello se usarán diferentes recursos, como cuerpos de escritura o firmas antiguas, como material indubitado.

Se procede a «meter» la demanda

Una vez que el informe pericial se ha emitido y el resultado concuerda con lo que alega el cliente, el abogado tramitará la demanda, incluyendo la pericial y todas las pruebas que considere oportuno.

En el caso de que el cliente hubiese decidido no incluir el informe pericial, el andamio legal de toda la demanda sería tan endeble que pudiera darse el caso incluso de que no se admitiese a trámite por falta de pruebas.

Conclusión

En aquellos casos en los que la autenticidad de una firma se encuentra en entredicho, la colaboración con un perito calígrafo se presenta como una estrategia legal inevitable. Este caso básico ilustra cómo la intervención de un experto en grafística no solo protege los derechos del acusado, sino que también fortalece la integridad del sistema judicial al garantizar que las pruebas presentadas sean veraces y confiables.

Iván Rodríguez, perito calígrafo